¿Tras la tormenta siempre llega la calma?, bueno, bueno, siempre hay excepciones que confirman la regla y esta es una de ellas.
Nos despierta el amanecer, en algún lugar recóndito del barco supongo que estará mi reloj, desayunamos en cubierta las tostadas de rigor con el cafelito, arranchamos el barco para partir y nos disponemos a arrancar el motor para seguir nuestra derrota hacia el Sur.
¡Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii¡ La alarma sonora del cuadro de mando del motor no cesa...............¿es que no tenemos un momento de tranquilidad?, rápidamente levantamos el fondeo, paramos el motor, al cielo con las velas y nos alejamos de la costa.
Sin saber exactamente que le pasaba al motor ( ¿a quién llamas a las 7 de la mañana?), decidimos evitar la comprometida salida por el sur del golfo, a través del archipiélago que rodea la isla de Tavolara y poner proa hacia mar abierto hacia el este.
Las previsiones meteorológicas indicaban fuerza 9 al norte de las Baleares y fuerza 6 en nuestra zona, pero del NW lo cual nos evitaba tener que negociar olas importantes, salimos del golfo con el trapo bastante rizadito, teníamos 30 nudos de viento, proa al sur hasta que fuese una hora “decente” y llamar a un mecánico.
Alrededor de las 10, nos acercamos a la costa para tener buena cobertura de móvil y conexión a internet, no se porque pero se me ocurrió colgar un post en el foro de La Taberna del Puerto para intentar buscar ayuda virtual, entre tanto hablaba por teléfono con un mecánico en Alicante:
“Rafael, Rafael, Good morning, this is Tierra de Barros, Do you read me? Over”, …….lo que hace la costumbre…..¡¡¡que vuelvo a hablar con España¡¡¡……me da un diagnostico acertado, con los síntomas que le puedo describir……..vuelvo a abrir La Taberna del Puerto, y allí están los post de contestación (GRACIAS CHICOS ¡¡¡¡), en media hora multitud de respuestas y casos similares vividos que coinciden con el diagnostico del mecánico.......problemas de sensores, pero no es un problema importante......arrancamos el motor y a la media hora, desaparece la alarma.....buffffff, una cosa menos ¡¡.
El viento sigue arreciando, comienza a rachear y variar de intensidad entre 20 y 30 nudos, ¡esto es adrenalina¡........... sabiendo que podremos contar con el motor, buscamos la protección de la costa, para evitar al máximo la altura de las olas, sigue soplando del oeste.
Después de tantas emociones, nos acercamos a la playa de La Caletta, frente a la cual fondeamos en 5 metros, fondo claro de arena pero el viento no baja de 20 nudos, una buena ración de salchichas frescas al grill y la siesta proporcional.
Por la tarde, nos dejamos llevar por el viento y las olas de popa, únicamente con dos tercios del génova, dejamos que el TdB nos acercara hasta Cala Gonone, fondeo previsto para pasar la noche, esta zona es muy abruptas y la aceleración del viento, se hacía patente cada vez que doblábamos algún cabo, a ultima hora de la tarde, a nuestra llegado a Cala Gonone nos dimos cuenta que no era un fondeo seguro, muchas rocas cercanas y rachas que alcanzaban los 25 nudos, no teníamos otra opción que seguir navegando hasta el siguiente fondeo seguro: Arbatax, unas 20 millas más al sur, donde llegamos pasada la 01:00 de la madrugada.
En fin, un día emocionante, intenso y agotador de navegación con 75 millas recorridas......mañana toca hacer el vago.
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