04-08 de Diciembre : Alicante-Tabarca-Mar Menor-Cartagena

Enlace fotografico :

Viernes 03/12

Se iniciaba una nueva aventura del TdB, realizar la singladura Alicante-Cartagena, con escalas intermedias, haciendo honor a la verdadera navegación de crucero. La hora de reunión en el puerto eran las 21:00 h, llegamos casi todos al mismo tiempo. Decidimos realizar la compra para el viaje, el sábado por la mañana en un supermercado cercano.

Estibamos el equipaje y acompañamos a Alejandro a un parking cercano para dejar el coche, durante el puente, no sabemos la razón pero le tiene puesto a su coche un apodo muy peculiar: “El gato con botas”.

Nos fuimos a cenar, en plan tapeo, en uno de los locales del puerto.

En ese momento, nos vimos afectados por la “huelga” de controladores aéreos, habían paralizado el espacio aéreo nacional y el teléfono de Alejandro sonó……….una pareja de amigos estaba tirada en el aeropuerto de Valencia y sus planes de puente se habían volatilizado………..nuestra tripulación crecía……..a las 03:00 de la madrugada. ¡¡vaya horas¡¡ jajaja……….la espera se amenizó en un karaoke del puerto.

Sábado 04/12

Mientras preparaba el desayuno, la cadena Dial colaboró para despertar a los más dormilones. Hicimos la compra y………..a navegar. Mar plana y ni gota de viento, pusimos el motor.
Dejamos el cabo de Santa Pola por nuestro estribor, rumbo a la islita de Tabarca, donde fondeamos en la cara sur y la preparamos una deliciosa barbacoa, el tiempo acompañaba, mediodía con sol y calorcito.
Primer reto de esta travesía, ¡¡ un voluntario para subir al mástil ¡¡….Alex se decidió a probar la experiencia, arnés de seguridad, dos drizas, guindola y …¡¡arriba¡¡ jajaja, le gustó la experiencia, no había forma de convencerle que bajará, se quedó sin batería en la cámara de fotos y se decidió a bajar.

Primera hora de la tarde, seguíamos sin viento, seguimos con el motor, rumbo sur. Nuestra primera opción fue el mar Menor, pero no llegábamos a tiempo a la ultima apertura del Puente de la Estación, cambiamos nuestro planes y arrumbamos al Club Náutico de Torrevieja, donde recalamos con noche cerrada.

Domingo 05/12

Me levanté temprano, en busca de la panadería perdida, pan recién hecho y unas napolitanas para “el postre”.

Por fin teníamos viento, izamos la mayor dentro del puerto y el génova cruzando la bocana, ¡¡¡apagamos el motor¡¡, 12 nudos de viento del sur, el TdB volaba en ceñida, la cara de satisfacción se dibujada en la tripulación, parecía que nunca íbamos a navegar a vela.
¡¡Ehhh, mira¡¡, ¿Dónde?¿que?, mira, mira, allí, allí, …primer avistamiento de cetáceos, media docena de calderones, juguetearon con nosotros durante un cuarto de hora, una autentica preciosidad, no estábamos a más de 2 millas de la costa.

Según nos íbamos acercando a la Isla Grossa, el viento fue cayendo hasta 3 nudos, no había más remedio que arrancar el motor.

Momento importante de la mañana ¿2º desayuno?, cerveza y patatas fritas, para reponer fuerzas.
Pasamos entre la isla Grossa y El Farellón, el curri tubo su primera captura de …..algas, como siempre en estos casos, el cachondeo llega al máximo de la escala, fotos y videos por doquier, jaja, todavía no se que cara poner en estos casos.

Por nuestro estribor, iba pasando el carrusel de edificios de La Manga, siempre me sobrecoge este espectáculo……….negativamente.

Arrumbamos para atravesar la reserva marina de Isla Hormigas, la pregunta del millón ¡¡¿nadie tiene hambre? Porque yo estoy que me muero¡¡. Teníamos viento de Levante y buscamos la pequeña ensenada del Puerto de Cabo de Palos, para fondear y que Alex, nos preparara sus famosos macarrones……….1 kg para seis personas, creo que todavía quedan macarrones en el barco, jua jua jua.
El viento y el mar habían ido rolando al SE durante la mañana, no era cómoda la zona de fondeo entre el Cabo de Palos y Cartagena, por tanto, a cocinar en navegación con las olas por la aleta, toda una experiencia para cocer la pasta.

La puesta de sol, se iniciaba por la amura de babor, tantas puestas de sol y me siguen asombrando como la primera, siempre da la impresión que es más espectacular que la anterior……………los paparazzis náuticos hicieron un buen trabajo.

Durante el crepúsculo vespertino, llamamos al puerto de Cartagena, para confirmar amarre. A medio camino del cabo Negrete y cabo del Agua, comenzó a subir el viento, las bajas presiones previstas se acercaban, pero el deseo de navegar a vela era tal, que la previsión de 1 hora para arribar a Cartagena, se convirtieron en 3 horas de ceñidas nocturnas, bordo tras bordo.

El cielo estaba totalmente despejado. Nos divertimos dibujando las constelaciones celestes, la Osa Mayor, la estrella Polar y Casiopea, por el este, poco a poco se iba elevando Orión con su cinturón, le acompañaban Aldebarán y Capella.

La “feria” del megapuerto de Cartagena nos esperaba, Alex manejada con destreza el timón, y fue haciendo ejercicios de identificación de luces y señales, se había examinado del PER hacía 15 días….y ¿aquella luz roja? Esta fija, no parpadea, ¿Qué extraño?, jajajja, descojono general, era un semaforo, jaja. El marinero nos fue guiando por la emisora, amarramos y a las duchas. Eran las 12:00, todo cerrado. Noemí se había llevado caldo del cocido de su mami, cenamos en el barco una sopita de fideos calentita y algo de picar………todavía quedaba hielo en la nevera, lo rebajamos con alguna bebida espirituosa.

La suerte nos seguía acompañando, el frente de bajas presiones descargó agua durante la noche y siguió su curso, nuevamente el sol nos dio la bienvenida por la mañana.

Lunes 06/12


Llegaba la hora de poner proa al puerto de origen………arrumbamos hacia el SE, el viento no subía de 3 nudos en las inmediaciones del islote de Escombreras, buscábamos viento, queríamos viento…..saludamos a Cabo Tiñoso, por nuestra aleta de estribor.

A unas 4 millas por el través de Cabo del Agua, el viento comenzaba a subir 3, 4, 6, 8 nudos……apagamos el motor y nos envolvimos con el único sonido de nuestra proa surcando nuestro querido Mar Mediterráneo.
¡Nuevamente un grupo de delfines¡ nos acompañaron unos 10 minutos por nuestro estribor, eran 6 o 7, la verdad es que yo no se distinguirlos, pero Noemí es una gran aficionada a la fauna marina y nos ilustro en los diferentes tipos de delfines. Como cabía esperar, los paparazzis se hicieron con una nueva colección de fotografías, yo también, jeje.

Seguíamos con una suave ceñida, dirección SE, alejándonos de nuestro destino pero no importaba, estábamos gozando del momento, el trimado era bueno, prácticamente no hacía falta tocar la rueda del timón.

Cuando estábamos a unas 10 millas, al sur verdadero de Cabo de Palos, teníamos un viento del sur de 10 nudos, ¡¡PERFECTO¡¡, pusimos rumbo al cabo e izamos el spi.

En este caso, José se hizo cargo del trimado de esta “amable” vela, sus años de regatista en un Platu 25, se hicieron notar. Alex a la rueda, intentando no irse de orzada, había progresado mucho desde el primer día, se estaba relajando, ya conseguía ser suave en la dirección, acariciaba la rueda. El resto de la tripu, a las ordenes de José : ¡caza el amantillo del tangón¡, ¡la contra, la contra¡, ¡esa braza, rápido¡…..y así el TdB, planeaba por encima de los nudos, llegar al Cabo de Palos , fue visto y no visto.

El viento había subido a 17 nudos, teníamos que ser muy finos con el rumbo, Alex se fue de orzada (de las buenas) en el momento que José había ido al baño, me ahorraré los detalles escabrosos. La frase más significativa del momento fue :” Coooooño, tira las patatas fritas y larga las escotas”. Jajaja.

Con ese viento, decidimos arriar el spi……..estábamos de crucero y tuvimos que tirar patatas fritas y cacahuetes, no es admisible, la cervecita de media mañana es sagrada, ¡ni spi ni nada¡.
Según nos aproximábamos a las Islas Hormigas, el viento seguía subiendo, 20 nudos por la aleta de estribor……..al este verdadero del Cabo de Palos, nos amuramos a babor buscando la playa de la Manga, para fondear y comer.

En el instante de pasar las Islas Hormigas, el viento subió a 30 nudos, de repente, escorados a tope, dejamos la mayor en banda y comenzamos a rizar el génova, nos costo su trabajito, si señor, si señor. Cambiamos de idea y buscamos el resguardo al norte de Cabo de Palos, fondeamos, comimos y siestecita, el viento no bajaba de 20 nudos……estábamos tres veleros.

Tras confirmar el amarre en el puerto de Tomás de Maestre, planificamos la entrada en el Mar Menor con la última apertura del puente de La Estación.

Llegamos 10 minutos antes de la apertura, entrando y saliendo del canal de paso, esperábamos la apertura. Avisan por radio 5 minutos antes de la apertura, confirmamos nuestra intención de entrar y …adentro.
Cuando pasábamos por debajo del puente, muchos automovilistas estaban asomados a la barandilla viendo pasar el velero. Alex que es un cachondo, se lo pasó en grande, saludándolos a todos.

Amarramos en el puerto, ducha y a cenar en una pizzería. Unas de la tripulantes, Sophie, es origen Belga y habla perfectamente francés, aunque lleva residiendo en España desde ¿los 15 años?, y no se le nota el típico acento francés. Pero teníamos ganas de risas, Sophie se ofreció a pedir el vino de la cena, con un fuerte acento francés, el vino elegido fue “Barbadillo”, imaginaros el cachondeo, “pog favog, una botella de bagggbadillo”. Todavía me estoy riendo, estoy escribiendo este relato y se me están saltando la lágrimas de recordarlo………podréis suponer, que se ha convertido en el vino oficial del barco.

La noche terminó en un local de copas, jugando a la videoconsola en la barra, no es necesario entrar en detalles, son fácilmente imaginables.


Martes 07/12


Amanece un día esplendoroso, no hay nubes, sopla un viento de fuerza 3, condiciones ideales. Planificamos pasar el día, navegando por el Mar Menor y salir hacia Alicante, con la apertura del puente a la 18:00 h.
Navegar en el Mar Menor, es un autentico privilegio, con viento y mar llana, pero la sensación de libertad que tienes en un velero, se ve quebrada por el puente, tengo la sensación de estar enjaulado, de no poder salir cuando quiero.

Durante la mañana, fuimos rotando las posiciones en el barco, izamos hasta el spi pero, imaginaros, se te acaba el mar enseguida. Alex seguía poniendo en práctica, sus conocimientos del reciente examen de PER, ¿Quién tiene preferencia ese o yo?.

Fondeamos en la cara noreste de la isla Perdiguera, daba la sensación de estar en una piscina, comimos y siestecita (jeje), algunos nos acercamos a la isla con el dingui, pero esta hecha una pena, llena de basura que hace tiempo que no se limpia.

Salimos al Mediterráneo, con la apertura de las 18:00, ya era de noche y arrumbamos hacia la isla de Tabarca, nos quedaba una larga travesía nocturna por delante.
Un número importante de barcos, volvían a puerto, aprovechamos para recordar las preferencia de paso, identificar rumbos y tipos de barcos, terminamos abriendo el libro de faros e identificando las deferentes marcas luminosas de la navegación. Es divertido, “contar” la secuencia de un faro………6 tripulantes, 6 secuencias distintas, jajaja, ¡¡no hay quien se aclare¡¡.

En la oscuridad de la noche, las condiciones de luminosidad producían un efecto muy extraño, la estela de TdB iba “encendiendo” el plancton, numerosas partículas fotoluminiscente de color verde, nos rodeaban.
Nos fuimos turnando entre las diferentes labores del barco y unos sueñecitos. Alex y yo, pasamos entre las señales luminosas de Tabarca, antes de adentrarnos en la bahía de Alicante.

El viento había caído completamente, estábamos recogiendo las velas, cuando de pronto, de la oscuridad, oímos BRRRRRRRR, ¿Qué pasa? La patrullera de la GC se nos colocó en parelelo y nos iluminó con un potente foco que no nos dejaba mirarles, 15 segundos después, desaparecieron “sin dejar rastro”.

Amarramos en el puerto base, a las 03:00 h, todos a domir……..la aventura terminó.

14/10/10 : Etapa final a Dénia

No ha parado de llover durante toda la noche, el amanecer es claro, el sol gana terreno, tendremos un cielo despejado.

Después de desayunar, preparamos la salida, controlamos con el AIS la entrada de las "golondrinas de pasajeros" y nos disponemos a cruzar la bocana.........

Tras pasar la bocana, vemos que acercan a toda velocidad dos "golondrinas",.........BROOOOOOMMMMMMMMM, oimos un fuerte estruendo y el motor se para.....

PIIIIIIIIIIII¡ La alarma de motor no deja de sonar, la silenciamos en el cuadro de mando.......tenemos el muelle exterior del puerto a 50 metros. ¡¡ Subidón de adrenalina¡¡.

Las velas van preparadas para ser izadas, el equipo de viento señala 3 nudos.......no tenemos el viento como aliado, debemos evitar a toda costa derivar contra el rompiente, tomamos la decisión inmediata de largar todo el fondeo y asegurar la integridad del barco, dicho y hecho, fondeados en la bocana del puerto y las "golondrinas" siguen acercandose...........lanzamos por radio, una llamada general de Securite por el canal 16. Identificamos en el AIS, el nombre de los dos barcos que se acercan y les llamamos directamente por el C16, indicandoles que estamos sin gobierno y fondeados en la entrada del puerto, reducen su velocidad y nos dan el resguardo suficiente para no incrementar la lista de problemas.

Bañador, gafas de bucear y al agua.....una enorme tabla de tres metros, se habia trabado entre la helice y el timón, no dejando que ninguno de los dos se moviese, en la foto podemos ver "los bocados" que le dío la helice, antes de pararse. La subimos a borda, la trincamos para una posible reclamación al seguro ¿que hacemos?

¿hay daños en el barco?¿orza, timón, helice, motor?
Zafarrancho de revisión del barco, sentina, bocina de la helice, tornillos de la orza, timón, casco,...no hacemos agua ...bueno parece que solo ha sido un susto, falta revisar si el eje o el motor han sufrido algún daño. Cruzamos los dedos y... arranca a la primera, no se perciben vibraciones de la helice, todo en regla, media hora de pruebas "cerca de puerto" con el motor a diferentes regímenes y todo OK.¡¡ Rumbo a Denia¡¡¡

Establecimos una rutina cada hora, en todos los puntos accesibles desde el interior, para comprobar que no haciamos agua, todo en regla.

Tras dejar la influencia de los freuds y Es Vedra, el viento comienza a subir, favorable en intensidad y rumbo, 15 nudos y amurados a estribor, rumbo directo a Denia, sin manobrar salvo a la hora de comer, claro, la comodidad ante todo, jaja. A media tarde, el viento subió a 20 nudos, la escora se hizo incomoda y el barco perdía velocidad, un rizo en la mayor y volvemos a marcar 8 nudos en la corredera, un verdadero placer¡¡¡.

El curri volvió a saltar dos veces en esta travesía, dos piezas de regalo para casa. Entramos con noche cerrada en el purto de Denia..........un pie en el pantalán y el primer pensamiento fue ......... volvemos al barco y largamos amarras inmediatamente...........